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TALLER PARA
APRENDER A
LIGAR
(Habilidades de Seducción y relaciones personales)
Vicente Gascón García
Psicólogo especialista en sexología
Fernando el Católico, 24-4º-14ª 46008 VALENCIA
Tlfs. 96 165 60 69 y 649 33 15 88
vicentegasgar@eresmas.comhttp://www.espaiterapeutic.com INTRODUCCIÓN:
El taller para aprender a ligar es un encuentro entre personas de ambos sexos, donde se facilitan las estrategias y técnicas para poder conocer y relacionarse socialmente.
En la actualidad un taller de estas características es muy útil, dado que la mayoría 0de personas, de diferentes edades, no dispone de la seguridad y confianza necesarias para entablar relaciones personales. Se recurre a las guías de contactos de los periódicos y revistas, a las agencias matrimoniales, a Internet, a las drogas y al alcohol para desinhibirse y a un sin fin de estrategias poco útiles y que llevan a la desesperación y la sensación de inutilidad y fracaso que muchas personas tienen. Aparte esta el tema de las relaciones anteriores que constituyen muchas veces un ejemplo de la dificultad que existe hoy en día para convivir y mantener una pareja estable.
Si bien es cierto, que ha habido una liberalización en torno al tema de la sexualidad y de las relaciones de pareja, también lo es que nos hemos deshumanizado un poco y que necesitamos un espacio de reencuentro con nosotros mismos, donde aprendamos a potenciar nuestras habilidades y capacidades de seducción con optimismo.
Ciertamente, el termino “ligar”, puede dar lugar a connotaciones negativas en función de la experiencia personal de algunas personas. Pero “ligar”, significa también saber relacionarse adecuadamente con las personas de uno u otro sexo, respetando a los demás y considerándose como iguales. Significa expresar con sinceridad lo que uno quiere o no quiere, y aceptar de mutuo acuerdo lo que ambos decidan, sin que ninguno se sienta presionado a tomar una decisión de la que no está totalmente convencido.
Con unas adecuadas habilidades sociales, no seria absolutamente necesario recurrir a la “litrona”, a los “bares ambulantes” de los parkings de las discotecas, o al consumo de sustancias que les ayude a decidir con mas facilidad o a suprimir las inhibiciones personales. Para lamentarlo al día siguiente, o caer en la dependencia de estas sustancias, o introducirse en la inercia de las sucesivas relaciones superficiales, muchas veces frustrantes, que acaban con la autoestima de los jóvenes y los sumerge en crisis depresivas.
En muchas ocasiones atendemos en la consulta a personas que tras haber sufrido una ruptura sentimental, comentan haber olvidado las habilidades para relacionarse con los demás y principalmente cuando tienen interés por encontrar una nueva pareja. Muchos creen que esto de seducir se reduce a una serie de habilidades y técnicas, que se pueden aprender siguiendo el modelo de un “experto en la materia”, que va cambiando de pareja según sus apetencias o gustos, o que logra con cierta facilidad ganarse la atención de cualquier persona en la que fija su interés.
Sin embargo, muchos muestran serias dificultades para contactar con personas de uno u otro sexo, con la finalidad de entablar nuevas relaciones y más aún, cuando tienen un especial interés afectivo o sensual hacia la otra persona. Quizá con un poco de esfuerzo o con ayuda de algún amigo, puede lograr relacionarse con esa persona, pero, ¿cómo proponerle una cita?, ¿cómo poder llegar a plantear una relación afectiva o sexual?.
Tampoco, hemos de pensar que las cosas han de llegar por sí solas. Va a ser necesario prestar atención a una serie de requisitos mínimos para llegar a mantener relaciones positivas con los demás:
Todo esto tiene mucho que ver con la autoestima, con sentirnos seguros de nuestras cualidades, con sentirnos capaces de asumir las posibles frustraciones sin sufrimiento, con saber actuar con espontaneidad, naturalidad y optimismo.
Para mantener un buen grado de autoestima, es preciso hacer una autovaloración, saber qué cosas nos gustan y nos disgustan de nosotros mismos. Corregir aquello de nosotros que nos parece inadecuado; o en todo caso, cuando algo no es susceptible de cambio, aprender a aceptarnos tal cómo somos. De poco sirve, adquirir habilidades de “Don Juan” o de “conquistadora irresistible”, y crearnos una imagen totalmente artificial de nosotros mismos, lo cual, posiblemente nos conduciría a relaciones superficiales, cuando no conflictivas y a sufrir o hacer sufrir al otro.
Salir a seducir es una tarea donde nos arriesgamos ser rechazados, y por lo tanto a que sufra nuestro orgullo y autoestima. Pero sin el intento nunca habría acercamiento, no arriesgar es perder oportunidades. Es importante dirigirnos a alguien sintiéndonos una persona valiosa, segura de sí misma, aunque sin presunción, ni yendo de desvalido e inútil, lo cual sólo generaría compasión, en lugar de pasión.
Es fundamental el cuidado de la apariencia personal, los gestos y la postura. Cada grupo social y en cada cultura tienen establecidos unos valores o modelos identificativos del grupo al cual se pertenece. Pretender entablar relaciones dentro de un determinado ámbito, sin adecuarse a estos valores, puede tener un coste, el aislamiento social. Además de cuidar la apariencia física, nuestra ropa, peso, peinado, maquillaje, .. Requiere asumir ciertas actitudes, comportamientos o maneras de hacer las cosas; pero que, de alguna manera, sean compatibles con nuestras características personales. Todo esto va a constituir nuestra carta de presentación, y va a determinar al tipo de personas que podemos gustar.
Hemos de cuidar tanto la comunicación verbal, como la comunicación no verbal, ya que es necesaria una cierta coherencia entre la una y la otra. El “seductor” o “seductora” sabe utilizar palabras halagadoras y atrayentes, pero sin sinceridad. Su lenguaje no verbal puede revelar su hipocresía y adulación.
En un principio, durante la conversación conviene tratar temas poco transcendentes, siendo divertido y ocurrente. Pero sin trivializar o ir de entendido, y si no te consideras muy gracioso no lo intentes. Busca tu estilo personal, no trates de hacer cosas o hablar de algo que no dominas.
Más importante que hablar, es saber escuchar. A veces, podemos estar tan concentrados en lo que vamos a decir que olvidamos prestar atención a lo que nos dicen. Cuando escuchamos adecuadamente hacemos que la otra persona se sienta importante, que merece nuestra atención, pero sin llegar a ser empalagosos. Para que el otro se sienta escuchado, conviene dar muestras de ello, asintiendo con la cabeza, respondiendo sus cuestiones, aportando nuestras opiniones o corroborando lo dicho. Hemos de saber sincerarnos con la otra persona, trasmitir mensajes exclusivos para el otro, haciendo notar, que realmente es alguien que nos importa.
Dentro de la seducción cabe una cierta dosis de misterio, dejar que la otra persona nos vaya descubriendo. Crear un especial magnetismo que despierte en la otra persona interés por conocernos más profundamente. Se puede dar información sobre nosotros, pero sin que se convierta en una completa autobiografía, ni ponernos a su total disposición. Muchas veces se valora más todo aquello que cuesta conseguir, que lo fácilmente accesible.
En algunos casos, el seductor puede actuar con alguna finalidad premeditada, como podría ser la utilización de la conquista amorosa para apuntarse tantos, o la seducción y abandono o la caza de la pareja de otro. A veces es fácil reconocer y aceptar ese juego; pero cuando no se percibe, uno puede crearse falsas expectativas y llegar a sufrir daño moral. Esta finalidad de ligar para apuntarse tantos, puede ser indicativa de un fuerte contenido de inseguridad interior. Los que consideran a los otros como meros objetos sexuales para su uso, y necesitan hacer conquistas para luego despreciarlas, pueden hacer verdadero daño.
Junto con la autoestima antes mencionada, es necesaria la asertividad, es decir, afirmarse en los propios criterios, sin dejarse extorsionar ni asediar por ningún otro, por muy interesante que pueda parecer o por la importancia o prestigio que pudiera tener.
Los hay que tienen un interés desmesurado por conseguir relaciones sexuales, haciendo objeto de su deseo a cualquier mujer u hombre que tenga cerca, con le fin de satisfacer la urgente necesidad de demostrar su hombría o su atractivo, sin tener en cuenta a la otra persona.
También aceptar por rutina una relación sexual es tan irracional como negarse obsesivamente. La oportunidad de decir que sí llega cuando hay afecto e interés entre dos personas y ambas están dispuestas a disfrutar del encuentro sin ataduras ni obligaciones consiguientes. Así mismo, es preferible decir no, a decir que sí por lástima.
Entre los “seductores profesionales”, podemos encontrar los que su interés principal es la vida amorosa por sí misma, necesitan amar y sobre todo sentirse amados. Están los dominados por su egocentrismo, con un alto grado de autonomía y autosuficiencia. Los que no tienen especiales necesidades eróticas, y su interés es asumir el papel de conductores; son independientes y difícil de intimidar. Los que necesitan contactos sociales porque no pueden prescindir de la admiración de los demás; aunque los demás carecen de interés para ellos.
Por la otra parte nos podemos encontrar con el socialmente cohibido, que no se siente interesado por el entorno, es introvertido y espera en silencio que descubran su valía. Con su timidez y retraimiento impresiona al otro, que tiende a idealizarle y sentirse comprendido o atraído “místicamente” por él.
En las relaciones amorosas pasajeras en las que uno considera a su pareja, teóricamente, como un ser independiente, suele producirse la ruptura tan pronto como se ha conquistado al otro. El acercamiento se hace amenazador y rompe bruscamente la relación, porque el otro se ha aproximado demasiado.
El enamoramiento no está determinado por las cualidades de la otra persona, sino que es el hecho de estar enamorado lo que hacen manifiestas esas cualidades. Y también, que muchas veces se suele confundir el amor con otras emociones intensas como son los celos, el control, o los sentimientos de posesión y dependencia de la otra persona.
CONTENIDO DIDACTICO:
Los contenidos de este taller son:
• Autoestima, que trata sobre la valoración positiva de uno mismo y la confianza en las propias capacidades.
• Asertividad, hacer valer los derechos propios, expresar opiniones, expresar sentimientos y deseos de una forma clara, sincera y apropiada.
• La seducción, atraer la atención de la otra persona desarrollando habilidades sociales en la relación con los demás y diferenciando las actitudes sinceras de las manipulaciones engañosas.
• Concertación de citas, basado en las habilidades de negociación y en la toma de decisiones.
• Solución de conflictos, capacitar para su solución o para poder volver la vista hacia nuestro interior y alejarnos de quien nos daña o de aquel a quien hacemos sufrir, sin animadversión.
ESQUEMA DEL CURSO:
-Técnicas de presentación y encuentro.
-Autoestima. Evaluación y mejora.
-Asertividad: Defensa de nuestros intereses, opiniones y derechos.
-Estrategias y habilidades para seducir.
-Concertación de citas.
-El amor y la relación de pareja.
ANÁLISIS DEL GRUPO DESTINATARIO:
Este taller puede dirigirse a personas de diferentes grupos de edad, incluso ya lo hemos realizado con de menos de 16 años. Si bien la practica nos ha mostrado que no resulta práctico mezclar en un mismo curso participantes situados en puntos opuestos de la escala de edades, por lo que vemos conveniente plantear curso independientes para los siguiente grupos de edad:
-Grupos de adolescentes (hasta los 17 años)
- Grupos de jóvenes (18-25 años).
-Grupos de personas de mediana edad (de 23 años en adelante).
-Grupos especiales (separados/as, divorciados/as, viudos/as, adolescentes problemáticos, tercera edad institucionalizada, amas de casa, asociaciones de mujeres..)
En general, puede aplicarse a todo aquel carente de habilidades para relacionarse con los demás, para expresar ideas, opiniones o sentimientos propios; o tenga dificultades para aceptar o rechazar las ideas o propuestas de otros.
OBJETIVOS GENERALES:
• -Potenciar la autoestima: Apreciarse y valorarse
• -Potenciar la asertividad: capacidad de defender nuestros derechos, opiniones y creencias, facilitando el que los demás también lo hagan, Aceptar el rechazo
• -Potenciar las habilidades sociales generales: relación, comunicación, compromiso,...
• -Potenciar las habilidades o estrategias para seducir o ligar: habilidades de negociación y concertación
• -Potenciar las habilidades para mantener una relación de pareja: Valorar y apreciar a los demás
• -Potenciar las habilidades para reconocer los sentimientos y emociones.
• -Potenciar la personalidad para saber reponerse de una ruptura de pareja.
OBJETIVOS OPERATIVOS:
• -Conocer nuestras dificultades y carencias en los temas de:
Autoestima.
Habilidades sociales.
Asertividad.
Habilidades de seducción.
Concertación y negociación
Relación de pareja.
Amor.
Solución de conflictos.
• -Facilitar mediante ensayos, dinámicas y recuerdo de experiencias y situaciones personales vividas el aprendizaje de nuevas técnicas y estrategias útiles de cara a la mejora personal de nuestros recursos.
OBJETIVOS ESPECIFICOS
Desinhibir
Fomentar la participación
Propiciar la implicación
Tomar contacto con los demás
Valorarse a sí mismos y valorar a los demás.
Adquirir seguridad en las relaciones interpersonales.
Escuchar y comprender
Expresar ideas, opiniones, deseos o sentimientos
Aceptar, rechazar o rebatir en base a los propios criterios.
Desarrollar el pensamiento critico
Aceptar el rechazo o las muestras de aprecio.
Fomentar la sinceridad
Ser capaces de pedir a los demás
Valorar que cosas les atrae a cada sexo
Saber que cada uno tiene una forma personal de seducir
Conocer formas de relacionarse con los demás
Entender la conducta como habilidad
Aprender habilidades sociales
Identificar habilidades reforzadas
Discriminar las estrategias.
Efectuar reforzamiento directo.
Aprender mediante exposición a modelos
Realizar feedback interpersonal
Desarrollar expectativas cognitivas
Eliminar la ansiedad debida al deseo de entablar relaciones
TEMPORALIZACIÓN:
4 Sesiones de 3 horas cada una, (12 horas). En ocasiones lo hemos impartido en 3 sesiones de 3 horas, pero suele resultar insuficiente y de hecho en las evaluaciones efectuadas por los participantes reflejan esta demanda de más tiempo de dedicación.
El coste es de 600 euros (menos la retención del 15% de IRPF).
ESPACIO:
Estos talleres los hemos realizado en todo tipo de espacios, aulas, salones de actos, gimnasios e incluso en parques al aire libre. Por estas experiencias, hemos observado que el espacio más propicio (independiente mente de si es exterior o interior) ha de ser amplio, que permita la movilidad de sillas y la división en pequeños grupos y parejas con cierta independencia y que a la vez, permita la reagrupación para las explicaciones colectivas.
Esta ubicación, ha de permitir la utilización de medios audiovisuales (proyección de transparencias, diapositivas o si se dispone de recursos suficiente métodos multimedia, y que puedan permitir la realización de un taller totalmente dinámico y vivencial.
Ya que las dinámicas a realizar tienen un gran contenido lúdico, se desarrollan por todo el espacio disponible.
En otras ocasiones la mayor dificultad se ha presentado cuando se ha hecho coincidir con actividades que requerían música de alto volumen, o que supusiese también mucha movilización de participantes y que dificultaban las explicaciones o la comunicación más intimistas en los subgrupos de menor tamaño.
RECURSOS:
-Materiales de ejecución escrita
-Dossier resumen para el alumnado.
-Aportes bibliográficos
-Dinámicas diversas: Role-Playing, ejemplos prácticos, casos reales, dramatización, terapia de grupo.....
-Técnicas de relajación.
-Medios audiovisuales, proyectores, sistemas multimedia, reproductores de música,…..
METODOLOGÍA
Exposición teórica de los conceptos fundamentales, complementados con la realización de ejercicios intercalados, aplicación de técnicas de dinámica de grupos y propiciar la participación y el debate
Mediante diversas técnicas de dinámica de grupos, propiciaremos la toma de contacto tanto entre los participantes en el curso, como con los profesores del mismo. De tal forma que permita romper el hielo inicial y favorezca la integración en las tareas y en la relación con los demás.
Se trata de darse a conocer al resto de los asistentes, para lo cual se combinará en trabajo en el grupo total, con dinámicas en pequeños grupos o incluso en parejas. Con la finalidad de propiciar la comunicación, la motivación y la participación.
Trabajamos con grupos de unas 25-30 personas, donde se favorece la comunicación, la motivación y la participación. A su vez, este grupo se divide en otros más pequeños, de 4 ó 5 personas, o en parejas, cuando así lo requiere la actividad realizada. Estas dinámicas grupales permiten tanto la reflexión individual como la grupal.
Es, pues, un método dinámico y participativo, que permite que los participantes se impliquen, se relacionen con los demás y se diviertan.
EVALUACIÓN POR LOS PARTICIPANTES:
En la última sesión, solemos pasar un cuestionario a los participantes para evaluar el taller.
Estos cuestionarios se entregan posteriormente a los responsables de la organización de las actividades.
EQUIPO DOCENTE:
Mª Teresa Miralles (Gandía)
Vicente Gascón (L’Eliana)
Somos parte de un equipo de psicólogos especializados en sexualidad, cuyos objetivos son la promoción, tratamiento e investigación en todos los ámbitos de la sexualidad humana. Por estas razones, venimos realizando este tipo de actividades encaminados, primordialmente, a la mejora de las relaciones interpersonales con la adquisición de habilidades sociales y de comunicación, enfocado como una actividad a la vez cultural y formativa.
Para ello hemos confeccionado este programa de temas de carácter formativo, que, pensamos, será de gran interés de la población en general. Pretendemos transmitir a todos una visión positiva de las relaciones personales y de la sexualidad.
Tenemos elaborado un conjunto de temas formativos para la salud afectiva y sexual, consistente en una amplia gama de conferencias y talleres abordando distintos aspectos de la sexualidad humana, que pueden ir dirigidos tanto a profesionales de la salud o la enseñanza, como a niños, adolescentes y adultos
Cada cual abordado de acuerdo a la población a la que se dirijan dichas conferencias y talleres.
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