Tomacafés
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El tomacafés es el típico amigo de todas las tías que conoce. Se caracteriza por ser el único chico con el que las chicas desean estar, si bien es cierto que sus intenciones son claramente sexuales, pero no consigue nunca llegar a la "segunda base". Heterosexual y hasta en ocasiones guapete, se piensa que quedando a tomar café con sus amigas y aguantarles el rollo, va a conseguir algo. Nada más lejos de la realidad, ya que llega a convertirse en una más del grupo de amigas.
Estrategias
El amigo tomacafés, empieza por hacer pasar por casuales encuentros bien estudiados con las mujeres del grupo de amigos. Con el tan solitario comentario que oiga en plan: "Te veo en Stradivarius a las seis" que diga una amiga a otra, éste hará como que precisamente iba a Stradivarius a esa hora, y el encontrarlas haya sido por una simple casualidad del destino. Las presas, sin darse cuenta, comenzarán a ver al tomacafés como un amigo (algo incomprensible a toda razón lógica).
Tras este curioso encuentro, en el que el tomacafés no comprará nada, se ofrecerá a acompañar a las presas de tiendas durante el resto del sábado por la tarde. Las mujeres irán a su aire, hablando de sus cosas, mientras el tomacafés estará detrás de ellas, callado, tomando nota de cómo se comportan, para más adelante, usarlo en su beneficio.
Otra estrategia a seguir por este elemento, es la de hacer casual el ir solo a un garito por la noche en fin de semana, donde mira tú por donde, estaban todas las chicas del grupo. Y ahí, al ritmo de Alejandro Sanz, su objetivo es el de intentar ser el único chico que puede salir con ellas en una "noche de chicas".
Quizá el mejor bien que tenga un tomacafés, sea el de disponer de una hermana. Da igual si es menor o mayor, el caso es hacerla (si no lo es ya) del grupo de las féminas, y con la escusa de acompañarla, poder inmiscuirse en los entresijos de la reunión de estrógenos.
Llegado cierto punto, el tomacafés comenzará a ganar terreno. Cuando esto suceda, no dudará en criticar a sus propios amigos para conquistar más terreno aún. Es el momento de soltar frases del tipo:
o No soy como el resto de los tíos.
o Me parece que X es un cabrón por hacerte eso.
o Si no estás a gusto con él, déjalo.
o Yo jamás te haría eso.
o Yo no te pediría que te depilases cada mes.
o Eso te pasa por liarte con un gilipollas.
o Los tíos dicen eso para llevarte a la cama. (Cuidado: En este punto, ya no se considera tío).
Proceder de un tomacafés
Cuando su estrategia ha llegado a buen puerto, el tomacafés ya es un integrante más del grupo de las chicas. Al fin ha conseguido el móvil de todas ellas, y las pone en un grupo especial en su teléfono móvil. Es ahora cuando se fija un número de objetivos preferenciales, entre ellos ser confidente de cualquiera de las chicas, ser quien más ayuda a una en lo de dejar a su novio, entender de ropa...
Es ahora cuando el tomacafés se vuelve peligroso para sus amigos. Ya no atiende a razones, cualquier cosa que se le diga le entra por un oído y le sale por el otro. Va a degüello con cualquier cosa que le haga ganar algún punto. Es capaz de contar que uno de los mejores amigos ha tenido ladillas, dando nombres, situando en el tiempo, concretando cualquier detalle y respondiendo a cualquier duda formulada. Para el grupo de chafarderas es un chico sincero del que sacar información de valor inestimable para destruir a cualquier persona que no les baile el agua.
A la caza
Llegados a este punto, el tomacafés decide que ya ha hecho bastante, ya se ha integrado en el grupito, y debe ir a por todas con alguna. Cree que cuenta con la ayuda de sus nuevas aliadas, las chafarderas, que en realidad lo ponen verde por detrás; sabedor de el estado civil de cada una, decide empezar a atacar a la más vulnerable de todas. Evidentemente, decide atacar a la que haga un tiempo que esté soltera, pero afectada por lo traumático de su ruptura (ya que rompió él para irse con otra). Poco a poco, hará un acercamiento sigiloso. Se asegurará de quedar con ella a tomar café por la tarde, a solas, bajo el anonimato de la cafetería, su plan de caza está servido: Seguirle el rollo hasta que le enternezca el corazón.
El tomacafés será todo oídos para la joven desprevenida:
* Se hará su confidente, su amigo, su defensor de los sentimientos pisoteados.
* Escuchará con atención lo que hizo o dejó de hacer su ex-novio, para saber a qué atenerse.
* Será quien se levante a pedir las consumiciones a la barra.
* Pondrá mala cara cuando un chico salude a su presa.
* Procurará no quedarse sin tema de conversación, le valdrá una vivencia con el ex-novio para criticarlo.
* Mantendrá una sonrisa afable con mirada tierna cada segundo de la reunión.
* Por supuesto, la acompañará a casa/bus cuando acabe la reunión.
Target locked
Una vez acabada la décima reunión, es cuando el tomacafés se siente en disposición de intentar algo más con su presa. Decide llevar a cabo su acoso y derribo. Mensajes sms cada 3 horas, tantear con las más allegadas si le gusta alguien, intentar captar el porcentaje de éxito en una incursión rápida y saber cual es su color favorito (dato inútil, por cierto).
En un vano intento, nuestro protagonista sufrirá un revés al enterarse de que aún sigue enamorada de su ex. Lo más probable es, que al profundizar poco a poco en su corazón, ésta descubra (y se explaye a gusto explicando) que lo que siente por el ex-novio era más espiritual y metafísico que una mera atracción carnal; que los momentos vividos, tanto los buenos como los malos son algo que lleva clavado en el alma; que cada vez que la llamaba al teléfono se le volcaba el corazón; que bla bla bla bla bla bla bla; bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla bla. Momento en el cual, una vena en el cerebro del tomacafés hara explosión.
* Opción A: Proseguir con el plan establecido asumiendo que habrá un terrible retraso.
* Opción B: Proseguir con el plan establecido derribando todo lo que siente. (Duro).
* Opción C: Fijarse un objetivo más accesible.
o Si A: El tomacafés ya ha dado muestras de ser paciente, podrá soportar un par de meses más acosando a la presa.
o Si B: Pasará a la ofensiva con todo su armamento. Pondrá a parir a su ex-mejor amigo.
o Si C: Lo hará al instante. Dejará a la chica con dos palmos de narices contando su rollo, y se irá a tantear a otra posible presa, comenzando desde cero.
¿Cuál es el destino de un tomacafés?
Pues realmente es ese. Su estrategia ha sido la de escuchar, y eso es muy apreciado por el genotipo XX. Pero es pareciado para poder hablar y hablar sin tener que oir a nadie. El hecho de haber estado oyendo los problemas de las chicas, ha conseguido que las chicas vean al tomacafés como un aliado para soltar sus problemas.
Sí, al final, el tomacafés acaba por ser considerado un oso de peluche asexuado.
Un saludete
