PRIMERO BUSCAS TU ÉXITO PERSONAL Y LUEGO LLEGAN LAS MUJERES

[Nightkiller]

Un vez más, grande Naxos:

Hoy voy a hablar de un grande de todos tiempos, y que para mí se ha convertido en una especie de héroe personal, por varias razones, porque representa un poco a los tímidos, porque también representa a los callados, esos que poco hablan pero que están tan concentrados en lo que hacen que logran la excelencia y logran volverse únicos en lo que hacen, y justamente eso representaba Ayrton Senna. Y lo incluyo en la categoría de seductor de una forma amplia, pues sin bien no es reconocido por su gran palmarés de conquista, si lo es por haber sido un piloto legendario de la fórmula 1, que redefinió la categoría y que con un gran y sólido juego interno logró ser exitoso. Si algo he querido que los lectores aprendan es que la seducción no es sólo la capacidad de seducir mujeres, sino también va involucrada a una fuerte noción de éxito.

Lo he puesto en mi lista de seductores legendarios, no justamente por su número de conquistas sino por su juego interno, porque es un modelo de constancia, perseverancia, paciencia y espíritu competitivo. Tengo algo muy claro con Ayrton Senna, si no hubiera sido piloto probablemente habría sido un tipo común y corriente, y sin temor a equivocarme también representa una paradoja: si no hubiera sido campeón del mundo probablemente sus éxitos con las mujeres hubieran sido muy promedio, dado su nivel de introversión y de timidez.

Ayrton Senna representa algo muy importante que para mí es una creencia personal: PRIMERO BUSCAS TU ÉXITO PERSONAL Y LUEGO LLEGAN LAS MUJERES. Así de simple, y lo digo porque veo a muchas personas dedicadas obsesivamente a conseguir mujeres sin concentrarse en sus proyectos personales, no leen otra cosa que no sea seducción, que no sean rutinas, videos, audios, etc., sin hacer un proyecto de vida que es lo mínimo que alguien que quiera salir adelante debería hacer y sin trabajar fuerte para revertir condiciones adversas si las tiene (poco dinero, poco atractivo, etc).

En el post pasado muchos me decían a propósito de Gene Simmons (post que está entre los polémicos que he escrito sin duda) y me decían que sin dinero él no hubiera sido nada. Y no lo dudo. Mi pregunta es: ¿eso te sorprende? Estamos jugando con algo científicamente muy estudiado desde las épocas de Darwin (no por los chicos de seducción científica) y por otros muchos etólogos, biólogos y psicólogos evolucionistas y es esto: la persona con más recursos y con mayor capacidad de provisión tienen una mayor oportunidad de atraer a parejas potenciales.

Muchos, de manera conformista a mi modo de ver, se llevarán las manos a la cabeza y dirán: pero cómo es posible, pero cómo puede pasar eso, pero ¿entonces qué hago? Pues bien, no te conformes con lo que tienes y busca más. Si te quejas porque unos tienes más mujeres o mayores oportunidades con las mujeres deja de quejarte y trabaja intensamente para mejorar tu calidad de vida, para ser más exitoso, para escalar y en el camino las mujeres irán llegando, y no quiero decir que atraigas a las mujeres porque son interesadas en tu billetera, NO NECESARIAMENTE. A las mujeres les interesa que si alguien va a ser su pareja transmita características deseables como: capacidad de emprender, de ser líder, de tomar decisiones bajo presión, de mantener una familia, de sobrellevar las dificultades.

En muchos de los comentarios vi cómo algunos están acostumbrados a las fórmulas fáciles, a las recetas mágicas, y en la vida nada funciona así, y me temo que quienes prometen eso no son más que estafadores que buscan crédulos perezosos que buscan esquivar el camino del esfuerzo para lograr sus metas. Esto generalmente obtiene algunos resultados a corto plazo, pero muy pocos o ninguno a largo plazo. Si los problemas para conseguir mujeres son coyunturales o muy pronunciados (como timidez e introversión alta o creencias poco ajustadas con la realidad femenina) es necesario un profundo trabajo personal: así de simple.

Eso de “aprende en un fin de semana a cómo ser un seductor” o “despierta el seductor que hay en ti” en una charla de 4 horas no existe. Y no piensen que yo nunca lo creí, de hecho alguna vez pensé que era posible, fue mí época inicial, la época donde más consumista de estos productos me volví: textos, audios, todo lo que cayera en mis manos. Sin embargo descubrí casi 10 años después que esto es un camino, y que todo me ha servido pero que he tenido que ser consistente en aplicar todos los principios y que muchos resultados recién los cosecho ahora y otros éxitos que tuve muy temprano he tenido que trabajar mucho para conservarlos.

¿Las charlas, los videos, los audios sirven? Pues claro que sirven, pero como un proyecto, como un camino. Como cosas que tomas a forma de alimentación personal para seguir en tu camino, pero los resultados inmediatos necesitan mucho trabajo para conservarlos.

Y es acá donde vuelvo a Ayrton Senna, un grande donde los haya, porque justamente su ética del trabajo era impresionante. Desde niño tenía una meta: ser campeón de la fórmula 1. Provino de una familia acomodada, y eso hay que decirlo porque lejos de quitarle mérito hace que uno valide más su laboriosidad y disciplina, porque no se conformó con lo que tenía y trabajó por una meta clara. En su carrera en la fórmula 1 comenzó de atrás para adelante, logrando su primera victoria en su segundo año en la categoría con la escudería Lotus. Era un corredor brillante bajo situaciones difíciles como la lluvia, y a diferencia de muchos de los flojos corredores de la fórmula 1 no temía arriesgarse para hacer un sobrepaso, incluso si eso arriesgaba su vida.

Su vida profesional dentro de la Fórmula 1 estuvo definida por su duelo con Alain Prost, otro grande, en aquel entonces bicampeón del mundo, veía cómo un joven y talentoso Senna llegaba cargado de talento y agallas a pelear de tú a tú por las victorias en las carreras. Y justamente esa rivalidad definió uno de los rasgos más importantes de juego interno de Senna: su prudencia y su extremada competitividad. No se dejó amilanar por la experiencia, trayectoria y relaciones políticas de Prost y se decidió dar lo mejor de sí. Quienes lo conocieron han dejado bien documentado que al interior de las pistas Senna era un piloto que no temía llevarse por delante a nadie, era bastante agresivo y muchos preferían dejarle pasar antes de estrellarse con él.

Esto contrastaba con una personalidad humilde, introvertida y tímida fuera de las pistas. Su temperamento era de una persona callada, pensativa, muchos incluso decían que siempre parecía un poco triste. Era un hombre religioso y su fe en Dios siempre fue reconocida por él como el motor profundo de su motivación. Sin embargo su mente estratégica siempre estaba pensando en cómo llegar a ser el número 1 y esa fue la obsesión de toda su vida. En el año 1988 logró ganar su primer campeonato de Fórmula 1, en un legendario duelo con Alain Prost.

El año 89 representó otro duelo con el francés Prost, duelo que en esta ocasión perdió el brasileño por una controvertida decisión que lo marginó de los puntos en el Gran Premio de Japón. Fue este el momento donde su juego interno se vio a prueba, fue marginado durante 6 meses de la fórmula 1 y se le impuso una cuantiosa multa. Ese hecho representó un cambio en su carácter: se volvió más competitivo, más duro rival, más polémico, pasó de ser un incómodo corredor a quien no le importaba nada sino ganar. Y no quiero decir que esto fuera un defecto ni mucho menos, lo que quiero mostrar es que un hecho difícil Senna lo capitalizó a su favor mostrando cómo en lugar de amilanarse y volverse más conservador podía volverse aún más radical.

Metódico, disciplinado, agresivo, competitivo, pero a la vez decente, sencillo y humilde logró el campeonato del mundo en 1990 y 1991. Sus romances con modelos fueron muy documentados, y uno en especial deseo destacar, para mostrar que Senna es el prototipo de un hombre normal que se vuelve en una figura mundial, y que muestra que aunque el dinero es importante no lo es todo en la seducción.

El gran interés romántico de Senna era la famosa modelo y presentadora Xuxa, una mujer a mi modo de ver cargada de una sexualidad bastante acentuada, ex novia de Pelé, actriz de películas eróticas, modelo de revistas porno que llegó a ser una seductora presentadora de programas para niños (la más sexual que recuerde yo). La historia detrás del romance muestra a un Senna obsesionado por la brasileña, y que era rechazado una y otra vez por ella. Senna ya era campeón del mundo cuando intentó conquistarla por primera vez, sin embargo Xuxa era más famosa que él y era conocida por ser muy exigente y obsesionada con los lujos y el poder, era una mujer independiente, hermosa, famosa, toda una mujer alfa.

Su estrategia no fue la más acertada, directamente apuntaba a halagarla y a mostrar de frente el grado de atracción que sentía por ella. Sin embargo a pesar de los rechazos consiguió lo que quería en virtud de una de sus mayores cualidades en las pistas: su perseverancia y competitividad. Por Xuxa cambió su estilo de peinado, pues se cuenta que la brasileña de decía que se veía como un típico tipo buena gente. Sin embargo las exigencias de Xuxa cansaron a Senna y éste prefirió las carreras a esta relación. Otras fuentes dicen que Senna se portó excesivamente complaciente con Xuxa y fue esta la que lo mandó a volar (esta es la versión que yo creo).

Como se ve, ser exitoso a veces no significa acceder a cualquier mujer. En ocasiones hay incompatibilidad, o errores de estrategia o de juego interno y no se consolida una relación. Eso no fue obstáculo para luego Senna se viera involucrado en sucesivas relaciones con modelos. Quizá Senna no haya sido un conquistador consumado pero su juego interno es lo que resulta más brillante de él, y son justamente los puntos que deseo destacar:

1. Humildad: Senna era un hombre sencillo, no era un hombre de estos ególatras que hoy tanto se fomentan, era una persona cercana y emotiva en su vida privada. Ayrton Senna era sin duda un buen tipo que no se avergonzaba de serlo, y esa fue su opción de vida.

2. Competitividad: Era una persona que tenía sus metas muy altas, y su único objetivo era ganar. Para él no era una victoria llegar de segundo o tercer lugar. Una frase muy famosa suya era: “El segundo es el primero de los perdedores”. Su competitividad lo orientó toda su vida y no temía confrontar a quien fuera con tal de lograr ser el vencedor.

3. Espiritualidad: He recibido muchos correos de personas cristianas o con diferentes tendencias religiosas que me preguntan si la seducción va en contra de ello. Yo pienso que no, siempre y cuando tu seducción esté enmarcada en principios éticos y no te vuelvas en un misógino o un acosador compulsivo de mujeres, que sólo las utiliza para su propio placer. Personalmente creo que la espiritualidad (de donde provenga) provee un sentido de equilibrio personal, contribuye con paz interior para lograr objetivos. Y no hablo de religiosidad o el hábito ritualista de seguir ciertos ritos, sino de contacto profundo con tus creencias y con la existencia y con el presente (el mejor ejemplo disponible que encuentro es a la forma del budismo zen). Senna era un hombre claramente religioso, católico, y esta creencia le proporcionó la paz en momentos donde todo estaba en contra y se le etiquetaba como un piloto problemático.

4. Perseverancia y dedicación: Senna reconocía que era la perseverancia la que vencía en todo. Y personalmente creo que es la perseverancia la que sobrepasa la fuerza, la misma inteligencia, la perseverancia hace que uno luche y luche y consiga sus metas por muy difíciles que sean.

5. Enfoque y concentración: Si algo admiro en los deportistas de élite es su capacidad de enfoque, concentración y su fuerte estado mental. Los logros que yo personalmente he tenido se han dado en épocas de intensa concentración y de intenso enfoque en lo que deseo, y es algo que he aprendido de deportistas como Senna. La fórmula 1 es un deporte muy complejo, en donde los mejores pilotos deben mantener un rendimiento único en un gran número de vueltas en un gran premio y cualquier desconcentración o distracción representa milésimas de segundos valiosas para lograr la victoria. En la vida suceden cosas así, la concentración o capacidad de enfocarse intensamente sobre algo, casi de forma obsesiva, logra una gran diferencia, más aún en épocas donde las personas rara vez logran estar atentas más de un par de minutos. La única excepción: las mujeres, si te enfocas demasiado en una terminarás perdiéndola.

6. Enfoque en tus metas primero luego en las mujeres: Eso es lo que diferencia a un líder de un pusilánime: en que busca su realización personal y no estar pendiente de complacer a las mujeres como si fuera una mascota necesitada de comida. El éxito conlleva generalmente un intenso trabajo en el juego interno que te hará más atractivo para el sexo opuesto.

Algunas de sus frases más legendarias son:

* "Si me dan a elegir, Alain (Prost) sería mi compañero de equipo, es la única forma de demostrar que soy mejor que él."

* "Una victoria es mejor que un millón de dólares."

* "La vida es demasiado corta para tener enemigos.

* "Si tengo un accidente, prefiero morir, soy una persona demasiado activa para pasar el resto de mi vida en una silla de ruedas."

* "No sé conducir de otra forma que no sea arriesgada. Cuando tengo que sobrepasar, sobrepaso. Cada piloto tiene un límite. El mío es un poco arriba del de los otros."

* "Correr, competir, lo llevo en la sangre, es parte de mi, es parte de mi vida."

* "Lo importante es ganar. Todo siempre. Esa historia de que lo importante es competir no pasa de ser demagogia."

* "Todos los años hay un campeón, pero no siempre hay un gran campeón."

* "Mis rivales no me quieren porque mi pecado es ser veloz"

* "Si una persona no tiene sueños no tiene razon de vivir, soñar es necesario aún cuando el sueño va más allá de la realidad, para mi soñar es uno de los principios de la vida."

* "Yo no tengo ídolos. Tengo admiración por el trabajo, la dedicación y la competencia."

* "No puedo justificar bajo ninguna razón llegar en segundo lugar."

Senna se fue de forma sorpresiva en el Gran Premio de Monza, en 1994. Tras su muerte finalizó una época dorada en la fórmula 1 que nunca ha vuelto a ser la misma. Para quienes admiramos este deporte jamás se han repetido las luchas vistas en aquella época, donde coincidían grandes pilotos en una misma pista, como Piquet, Senna, Prost, Mansell.

http://naxoseduccion.blogspot.com/2011/ ... senna.html

[Tyler]

Me cae muy bien nachos y suelo coincidir en muchas cosas de las que dice, por ejemplo en esta frase que retrata a unos cuantos maestros y aprendices noveles:

En muchos de los comentarios vi cómo algunos están acostumbrados a las fórmulas fáciles, a las recetas mágicas, y en la vida nada funciona así, y me temo que quienes prometen eso no son más que estafadores que buscan crédulos perezosos que buscan esquivar el camino del esfuerzo para lograr sus metas. Esto generalmente obtiene algunos resultados a corto plazo, pero muy pocos o ninguno a largo plazo. Si los problemas para conseguir mujeres son coyunturales o muy pronunciados (como timidez e introversión alta o creencias poco ajustadas con la realidad femenina) es necesario un profundo trabajo personal: así de simple.

Ya volviendo a este articulo me temo que el éxito personal no garantiza las mujeres, lo que garantiza las mujeres es el éxito social, si te haces rico, famoso o poderoso esta claro que las mujeres vendrán solas, pero eso no es éxito personal, el éxito personal como bien indica la palabra es algo muy personal y para uno puede consistir en ser el tío más rico del mundo mientras que para otro puede consistir en tener una casa en medio del campo y dedicarse a la cría de pepinos y gallinas, puede que ambos consigan lograr sus metas pero el de las gallinas y pepinos pocas modelos va a atraer ...

La búsqueda del éxito a mi modo de ver es muy peligrosa, se nos ha inculcado desde muy jovencitos que es el éxito, nuestra idea de éxito muchas veces es extrínseca a nosotros y como seas un poco torpe puedes desperdiciar toda tu vida buscando un éxito que o bien nunca conseguirás o peor aun conseguirás algún día solo para darte cuenta de que no era eso lo que tu realmente querías, sino aquello que te dijeron que querías.